Las peores inundaciones registradas en Gran Bretaña en los últimos 60 años disminuyeron hoy a pesar de la persistencia de las intensas lluvias que afectan a varias regiones desde hace más de una semana. Los habitantes de las zonas azotadas por el fenómeno climatológico amanecieron más tranquilos al no ocurrir en la última jornada desbordamientos de ríos.

Ninguno de los estudiantes matriculados en cursos de inglés gestionados en Inglaterra a través del Grupo Mundo En Red nos ha reportado un estado de emergencia en su zona o se ha visto afectado en manera alguna por estos eventos.

Como parte de las medidas de seguridad las autoridades orientaron la construcción de nuevos diques de emergencia después de que la víspera los servicios meteorológicos británicos pronosticaron abundantes precipitaciones.

La policía recomendó evitar el tránsito innecesario de vehículos ya que en muchas partes las calles no son aun transitables y las fuerzas de rescate están sobrecargadas.

Los meteorólogos prevén un clima seco en los próximos días, situación que favorecerá acelerar los trabajos de saneamiento.

El abastecimiento de agua potable es el principal problema. En Gloucestershire, una de las regiones más afectadas y donde se localizan algunas de las escuelas de nuestro Portfolio, cerca de 130 viviendas continúan sin ese servicio por lo que aumentan los temores debido a una posible aparición de enfermedades como el cólera.

En Inglaterra y Gales los pluviómetros registraron 387,6 milímetros de lluvia desde el mes de mayo, cifra récord para este periodo, señaló la Oficina Meteorológica británica.


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